lunes, 31 de octubre de 2011

Derechos de los ancianos

Durante las últimas décadas, uno de los factores demográficos básicos se ha visto afectada por cambio masivo: la edad. Nuestro corpus actual de conocimiento científico nos indica que la historia de la humanidad ha estado siempre marcada por altas tasas de natalidad acompañadas por las correspondientes tasas altas de mortalidad. Históricamente, la mayoría de las personas que habitaban el planeta al mismo tiempo se movían entre los límites de edad más frecuentes de esa época o tendían a estar por debajo de la media de edad. Sin embargo, debido a que las tasas de natalidad y mortalidad han tendido a disminir, según el Departamento de asuntos sociales y económicos de la Organización de Naciones Unidas, uno de cada diez habitantes del planeta tiene ahora sesenta años o más. Si las tasas de mortalidad y natalidad continúan descendiendo, según la tendencia actual, en el año 2050 una de cada cinco personas tendrá sesente años o más, y en el 2150 tendrá esa edad una de cada tres personas. Además, el grupo de los más ancianos son el segmento de más rápida expansión dentro de la población mayor. Actualmente, los más ancianos suponen el 11% del grupo de mayores de sesenta años, y este porcentaje habrá crecido hasta el 19% en el 2050.
Muchos gobiernos tienen en marcha sistemas de asistencia para las personas mayores, como seguridad social o atención médica gratuita o de precio reducido, por ejemplo. Sin embargo, la mayoría de estos sistemas se basan en el principio de que siempre habrá bastantes menos personas mayores que jóvenes o de mediana edad viviendo al mismo tiempo. A causa del descenso de la tasa de mortalidad, por tanto, estos sistemas están empezando a experimentar una sobrecarga que no hará más que aumentar conel tiempo. Además, la ratio de sostenibilidad de las personas mayores disminuye tanto en las regiones más desarrolladas como en las menos desarrolladas, lo que podría disminuir en un futuro la capacidad de las sociedades y gobiernos para cuidar de sus enfermos.
Estas tendencias demográficas están creando retos inéditos para toda la población, especialmente para los gobiernos de todas las naciones y estados del planeta. Las personas mayores son a menudo objeto de discriminación y abuso porque a menudo se piensa que es fácil aprovecharse de ellos. También existe la creencia, extendida en varios sectores de la población, de que las personas mayores carecen de importancia en un mundo acelerado, globalizado y cada vez más industrializado como es el mundo actual. Obviamente, el rápido crecimiento del número de personas mayores en el planeta estimula la urgencia de reconsiderar los derechos y los roles de las personas mayores en nuestro mundo.

Lau Mendoza

sábado, 29 de octubre de 2011

En familia

Los padres son lámparas y los abuelos son faros. La lámpara da fuego y calor, el faro irradia luz. El fuego descubre la piedra del camino, impidiendo el tropiezo. La luz exhibe la montaña de la meta, conjurando el extravío.
Los padres son brújulas y los abuelos son mapas. La brújula brinda orientación, el mapa transmite conocimiento. La orientación siempre conduce a la búsqueda, principio de toda aventura. El conocimiento siempre conduce al hallazgo, final de todo viaje.
Los padres son la nube y los abuelos son el mar. La nube fertiliza al planeta como lluvia. El mar fecunda los cielos como nube. La lluvia dice cómo la Vida, cayendo del cielo, se vuelve cuerpo. La nube dice cómo la Vida, fluyendo del cuerpo, se vuelve espíritu.
Los padres cuentan historias patrias y los abuelos cuentan leyendas épicas. La historia patria suscita un sentimiento nacional. El mito consolida un pensamiento universal. El sentimiento nacional otorga ciudadanía sobre un fragmento de la Tierra, llamado país. El pensamiento universal confiere ciudadanía sobre una porción de Dios, llamado Cosmos.
Los padres son los mineros de la esperanza y los abuelos son los orfebres de la fe. En nombre de la esperanza, los primeros inclinan el rostro ante el surco y siembran sus semillas en pos del fruto. En nombre de la fe, los segundos extienden sus palmas al viento y echan a volar sus plegarias en pos del lucero.
Los padres, por inexpertos, ven al hijo como brote de su carne. Los abuelos, por sabios, ven al nieto como prolongación de su esencia. La carne crece, se reproduce y desvanece. La esencia se purifica, se transforma y perpetúa. Por eso mientras los primeros anhelan hacer de su semilla un Hombre, los segundos buscan transformar a ese Hombre en un ángel.
Algo natural. Esos dulces viejos saben que la Tierra es el lugar donde el Hombre recupera sus alas perdidas.


Lau Mendoza

Sus relaciones





El abordaje del tema de las relaciones sociales e interpersonales en la tercera edad es acogido por mucha gente desde una perspectiva negativa. Siguiendo el modelo que la Teoría de la Desvinculación sostiene, las personas, se retiran de la sociedad por la ruptura de las relaciones sociales, por el cese de las funciones y por una reducción del compromiso con las normas y valores.
La vejez así planteada, puede percibirse como una pérdida, y esa ruptura en lo que respecta a las relaciones sociales, está determinada por la conjunción de una serie de factores tales como el alejamiento de las relaciones personales establecidas en el trabajo (con la pérdida del rol laboral), la carencia afectiva percibida en cuanto a la relación con los hijos(nido vacío), y la escasez en lo que se refiere a las relaciones con parientes y amigos que se van dejando por el camino como consecuencia de la distancia o la muerte. Así vista, la vejez, implica una transición negativa hacia la soledad y el desconcierto, de tal manera que para su adecuada adaptación las personas deberán reestructurar muchas de sus rutinas diarias y reorientar sus estructuras cognitivas y conductuales hacia patrones diferentes de comportamiento para una mejor integración y socialización en la etapa que están viviendo.
Haciendo referencia a la teoría de la desvinculación se parte de la idea de que la persona de avanzada edad desea ciertas formas de aislamiento social y al lograrlo se siente feliz y satisfecha.
Posteriormente Lehr, retomando esta misma teoría, hace referencia a la denominada Desvinculación Transitoria y señala que puede existir una alta satisfacción que vaya unida a escasos contactos sociales, lo cual aparece como una forma de reacción a determinadas situaciones de sobrecarga. Si una vez finalizada la adaptación del sujeto a la nueva situación se produce un buen ajuste, se puede observar una renovada vinculación social, por tanto,la cuestión de la desvinculación social sólo sería
temporal, no extendiéndose durante toda la vejez.
Desde nuestro punto de vista, aunque esta desadaptación tan sólo sea transitoria, incluso aunque incida más en los primeros momentos de la jubilación, existen ciertos problemas, como por ejemplo, los relacionados con la soledad, el sentirse solo/a, que son determinantes en la percepción que del nuevo período del ciclo vital tienen los ancianos.
Según un trabajo realizado por Sáez, Meléndez y Aleixandre (1995) al preguntar a la población anciana por aquellos problemas propios de su edad y percibidos como más relevantes, se encontró que la soledad era la variable por la que más directamente se sentían afectados (59%), seguido del rechazo familiar, que obtuvo un 33%. Estos datos implican la existencia de un problema desarrollado en la población anciana y que está sujeto a una serie de variables que este artículo pretende abordar, determinando a la par cómo según una serie de variables, se van produciendo una serie de cambios en la percepción que de las relaciones sociales e tienen.
Por ejemplo, lo que sí parece claro a través de los diferentes estudios, es que la desadaptación social afecta más intensamente a los hombres que a las mujeres, independientemente de que éstas sean trabajadoras regladas o no, dato posiblemente provocado por el segmento generacional que nos ocupa, dado que es en el hombre donde se operan los más altos índices de cambio al llegar el momento de la jubilación. También, existen diferencias en el tipo de apoyo social que uno y otro grupo demandan:
Mientras que los hombres manifiestan mayor necesidad de apoyo social, las mujeres se inclinan por un apoyo familiar más alto. En cualquier caso, tanto uno como otro son determinantes a la hora de mejorar la adaptación física y psicológica del sujeto en el nuevo período del ciclo vital, y por tanto, una base a la resolución de sus crisis evolutivas.
La calidad subjetiva del apoyo social, representa un indicador más claro de la satisfacción vital que la cantidad de apoyo social.
El apoyo de calidad es más eficaz en momentos de crisis que el de cantidad. Además la mayoría de las investigaciones han insistido en la importancia de la calidad por encima de la cantidad de apoyo. De todas formas, algunos investigadores han sugerido que, de la presencia de una red demasiado reducida, puede resultar una excesiva presión sobre las personas que proporcionan el apoyo. A este respecto, el efecto de un apoyo negativo es, por desgracia, claramente más fuerte (al menos estadísticamente hablando)
que el efecto del apoyo positivo.
La tendencia de las personas mayores a convertirse en más introvertidas viene dada por dos conjuntos de causas:
- una de ellas es, sencillamente, el estrés de los últimos años, siendo la introversión el resultado de la desesperación y de la depresión,
- otra es, primordialmente, la consecuencia del reconocimiento de la riqueza del mundo interior, y de la reducida necesidad de responder a las demandas sociales mediante el éxito y la participación.
La jubilación es un proceso continuo que pasa por una serie de seis etapas que nos pueden dar una idea sobre como se desarrollarán las relaciones sociales. Las etapas identificadas
son:
1. Prejubilación. Se caracteriza porque el individuo se orienta hacia sí mismo, hacia la idea de jubilarse.
Durante esta etapa se hipotetiza sobre cómo podrá ser la jubilación, fantaseando sobre el tema en algunas ocasiones.
2. Jubilación. Que puede conducir a tres tipos de vivencias alternativas: luna de miel, continuidad con las actividades de ocio planificadas o rutina y la de descanso.
- luna de miel: el sujeto intenta realizar todo lo que había deseado antes y no podía hacer. Es un período eufórico. No lo atraviesan todos,
- continuidad con las actividades de ocio planificadas o rutina: se continúa en contacto con actividades y grupos anteriores a la jubilación, variando únicamente el tiempo de dedicación, que ahora es mayor,
- descanso: algunas personas entran en esta fase a partir del momento de la jubilación. Se caracteriza por una reducción temporal de la actividad, de manera opuesta a la que se produce en la luna de miel.
3. Después de la fase jubilación, algunas personas pasan por una tercera fase de desencanto y depresión, que tiene lugar cuando el sujeto percibe que sus fantasías (agradables) sobre la jubilación no se producen.
4. Como continuación del desencanto o de las vivencias anteriores, se puede pasar por una etapa de reorientación en la cual se reevalúa la situación y se construyen percepciones realistas de la jubilación (ni todo es positivo, ni todo negativo).
5. En la quinta etapa, las personas desarrollan un estilo de vida rutinario que en muchos casos conduce a la satisfacción en tanto que indica que se ha logrado una estabilidad.
6. Por último, en la fase final, el rol de jubilado pierde relevancia en tanto que ya está plenamente asumido o es sustituido por otros roles (por ejemplo el de enfermo, o el de abuelo que colabora en casa, etc.).
Para concluir, debemos tener en cuenta que las relaciones sociales, en su forma, pueden ser una variable que cambia de manera significativa durante el período de la tercera edad. Estas variaciones notienen por qué ser radicales, en la medida que se producen sobre ejes que, de alguna manera, han estado presentes a lo largo de la vida, y ello, con las consabidas adaptaciones a cada periodo vital concreto.

Lau Mendoza

Cuidado de la Tercera edad

El cuidado de los mayores exige una precaución pluridisciplinaria como controlar la dieta, el ejercicio, la vacunación y la administración de medicamentos en forma regular.
Es sabido que de la atención médica de las personas mayores forman parte, (dada la diversidad de síntomas), distintos especialistas de la salud, quienes muchas veces medican en base a la enfermedad a tratar, sin tener en cuenta la sumatoria de medicamentos que en las diversas visitas acumula el paciente.
Es por ello que para evitar la polifarmacia, el paciente debe contar con su médico de cabecera, quien debe regular y chequear su medicación de base a fin de que no se produzcan interacciones medicamentosas desagradables, secundarismos y/o acumulación de droga en sangre.
Asimismo, la toma de cada medicamento debe tener un orden horario, a veces en directa relación con las comidas, por ello se recomienda al personal a cargo del cuidado del paciente el uso de pastilleros con fecha y hora de la toma, a fin de evitar que en uno de los frecuentes descuidos u olvidos, se ingiera en más o en menos el mismo medicamento.
Además de regular la posología ( dosis), el médico de cabecera observará la forma de presentación del comprimido a tomar, ya que muchas veces los trastornos en la deglución impiden el cumplimiento fiel del tratamiento.
curso-ancianosLa dieta y el ejercicio deben ser parte del cuidado integral del paciente de edad. La calidad de los nutrientes, la presentación, la diversidad de gustos y olores, la condimentación y el respeto por las indicaciones médicas ante alguna patología ya declarada (diabetes, HTA, ateroesclerosis, gota, etcétera) son importantes. El ejercicio, que puede ser programado, deberá consistir en caminatas, evitando todo tipo de sobreexposición al esfuerzo.
Las consultas al médico de cabecera deberán ser regulares, y aún ante el mejor estado general no deben ser inferiores de tres al año. El chequeo médico con los controles de análisis clínicos y la posibilidad de efectuar radiografías deben tener una regularidad preventiva.
La vacunación, (entiéndase la indicada para esta edad), por ejemplo la gripe, comienza su campaña en el otoño y está indicada por las Instituciones oficiales, aunque siempre deben contar con la aprobación del médico.
La Pneumo 23 en los bronquiales crónicos y enfisematosos, previene la posibilidad de infecciones respiratorias y se recomienda para la gente mayor también en el comienzo del otoño.
La antitetánica, con una dosificación 0 – 1 – 12 meses, ofrece una inmunidad por 10 años, cosa valiosa para quienes están expuestos por incapacidad a accidentes domésticos, caídas, etcétera. En caso de viajes, las vacunas para el cólera y la fiebre amarilla podrán ser de requerimientos si se visita países endémicos.
Con respecto a la prevención de los accidentes en la vida cotidiana, generadores de caídas y/o traumatismos con consecuencias que pueden ser de gravedad, los factores como la iluminación ambiente, la disposición del mobiliario, la adaptación de camas y sanitarios a la altura óptima para el paciente, la utilización de calzado antideslizante, barrales de apoyo en pasillos y baños, así como la instrumentación de bastones o trípodes, constituyen un capítulo al que detalladamente le damos forma en una nota preliminar.
Cuidados básicos en la alimentación
Es indispensable tener en cuenta que las necesidades energéticas están disminuidas en la tercera edad. Se necesita el 50 por ciento de la energía y no más, y se dará en forma de carbohidratos. Los requerimientos de proteínas están aumentados.
Las necesidades de minerales, oligoelementos y vitaminas están incrementados. El calcio, hierro, vitamina C, deben ser ajustados así como algunos oligoelementos importantes en la vejez como: el selenio, el zinc, el iodo y el cromo .
Una buena dieta persigue estos objetivos:
1) Debe ser equilibrada, variada y agradable al gusto y al olfato.
2) No debe contener alimentos nocivos, debe ser completa y de fácil digestión.
3) Es necesario que sea de su aceptación.
4) Tiene que incluir una buena ingesta de líquidos.
5) Se deben reducir al máximo posible los condimentos.
En el caso de presencia de alguna patología, es necesario revisar la composición de la dieta para que, cubriendo las necesidades calórico – proteicas no se perjudique la evolución de la enfermedad. (Por ejemplo: reducir el colesterol en la ateromatosis; las grasas en las cardiopatías, los azúcares en las diabetes).
Hay que suplementar con fibras los casos de estreñimiento, diverticulosis, hemorroides, etcétera.
A la hora de programar las dietas, hay que tener en cuenta las interacciones fármaco – nutrientes en los pacientes.
Es conveniente estimular a la persona mayor  a realizar ejercicios programados para que le apetezca comer y al ingerir calorías las acompañe del resto de los nutrientes.


Lau Mendoza

La tercera edad según los jóvenes

Un sondeo rápido: adulto mayor, anciana y anciano. Para cada uno de estas palabras qué atributos son los que se le vienen a  la mente. ¿Independiente / dependiente?; saludable / enfermizo; resistente / frágil; sexualmente activo / no activo? Elija uno de cada uno.
Este mismo ejercicio realizó el Observatorio Social de Envejecimiento de la Universidad de Chile con 520 universitarios de distintas carreras. Lo sorprendente de esta encuesta fue que el 47% de los entrevistados asociaron a los adultos mayores con dependientes, el 38% con enfermizos, el 42% con frágiles y el 50% con sexualmente no activos. Estas cifras aumentan cuando se les pregunta por “anciana”, no así con “anciano”.
Lo triste de esta mirada, sesgada por viejos paradigmas, es que la realidad muestra lo contrario. En Chile el 65% de las población adulta mayor es autovalente, el 31% tiene algún grado de dependencia y apenas el 4% es dependiente. En el ámbito sexual, se estima que el 60% de las mujeres y el 80% de los hombres sobre 70 años, mantiene algún tipo de actividad.
Este estudio nos confirma que en pleno siglo XXI no hemos sabido explotar una imagen positiva de los adultos mayores, más bien los hemos perpetuado en modelos de “la viejita gagá” de comerciales de jalea o sopa, por tomar ejemplos algo burdos. No obstante, esta situación debe presentársenos como una oportunidad para fomentar políticas públicas que incentiven las relaciones intergeneracionales y que destruyan la mirada añeja de los jóvenes.
Hoy los viejos están más jóvenes que nunca…



Lau Mendoza

Su destino.. ¿El abandono?


355738_01Las esquinas de las calles son tu aposento y con un caminar lento, esperas prontamente el final del tiempo.
Hilos plateados cubren tu cabeza. Hilos que nacieron hace mucho tiempo.
Tu cuerpo cansado luce encorvado; tu cabeza, agachada, y tu mirada, perdida. Porque para hoy no hay nada; solo los recuerdos de una vida pasada, cuando tu imagen adornaba el centro de un hogar, de una familia.
Ahora el llanto es tu imagen, sin música, sin amor, sin calor que te acompañe; solo tu sombra, viviendo de la misericordia de otros.
Misericordia que es como un dinosaurio, no por su tamaño, sino porque ya se ha extinguido; misericordia que tiene olor a fósil disecado.
Cada día son más, pero que cada día vemos menos. Delante de estas figuras olvidadas pasamos sin practicar lo que tanto hablamos y que, con el paso del tiempo, el mismo tiempo los ha olvidado.
Te acercas a ellos y huelen a tristeza, a lágrimas e insomnio. Y al terminar el día, hambriento, sediento y temblando de frío, un cuerpo débil sobre una banqueta húmeda se ha recostado y atrapado en el frío, el llanto, la tristeza, la soledad y la angustia; sus ojos para siempre ha cerrado.
Ninguna lágrima se ha derramado y, en su sepulcro, ninguna flor se ha 
colocado, porque al final del ocaso, de él nadie se ha recordado.


Lau Mendoza

lunes, 24 de octubre de 2011

Asilo de Ancianos

Es un hogar o albergue de ancianos, o cientificamente conocido como;  establecimiento que en medicina se denomina 3ª nivel donde se les brinda asistencia medica, abrigo, comida , cuidados, en caso de sus familiares no quieran o no puedan hacerlo o que no tengan familia.

En algunos lugares se les llama  verdaderos depositos de ancianos, donde hasta son maltratados y otros atendidos por personas muy amorosas, cariñosas que dan al anciano muchisim ayuda

El ser mayor de edad no significa; No tener los mismos derechos, los mismos valores, y sobre todo los mismos sentimientos, así que toma concincia con lo que pueden hacer con los seres de la tercera  edad que son las personas que nos cuidaron y darian la vida por ti y por los demás.

Toma conciencia!!

http://www.youtube.com/watch?v=2Lvxbgeon5I

Consejos para un buen trato...

Hablemos un poco acerca de los aspectos negativos en la tercera edad...   ¿Qué hay detrás de una cara triste, de un abuelo enojón, de un suspiro profundo?

Es muy común escuchar de personas que literalmente "ya están hartas de los desplantes", gente que todo el tiempo se queja de lo mala que es su vida por tener que hacerse cargo de una persona que pareciera nunca estar conforme. Pero realmente se han preguntado ¿por qué las cosas son así?
Debe existir un equilibrio entre la vida de uno y de otro, cambiar actitudes y perspectivas para evitar caer en arrebatos emocionales... Quizá de vez en cuando sea bueno detenerse y analizar lo que ellos piensan o sienten... Lee algunas de estas cosas que quizá te sirvan para comprenderle un poco mejor:

Miedo- Observa con detenimiento. A él o ella la vida se le ha vuelto muy frágil, ahora ya no puede hacer las cosas que hacía antes. Si algo sucediera quizá no podría levantarse del lugar en donde está.

Soledad- Piensa cuántos de sus amigos y seres queridos ya se han ido. Cuántos hace mucho que dejo de ver. Lo mucho que los extraña. Es normal que le veas triste o callado. Imagina lo que pasa por su mente cuando sabe que el tiempo no regresará.

Impotencia- Imagina.Tantas cosas que ahora no puede realizar. La velocidad con la que mira pasar sus días muchas veces es más rápida que sus propios pies. Eso quizá le genera ansiedad y enojo. Tal vez es por eso que muchas veces estalla con facilidad o toma las cosas muy personales.

Tristeza- Quizá tenga la mejor cama de la casa, una alimentación sana, un médico que le atiende, nietos que le amen, todo lo que necesita y sin embargo no dejas  de preguntarte ¿Por qué nunca está conforme?  No olvides que cada cabeza es un mundo. Tal vez sean las muchas horas de inactividad lo que le hacen pensar en lo que nunca pudo resolver, en lo que no pudo hacer, en lo que pudo decir, en lo quiso ser... Quizá la respuesta la puedas encontrar más allá de la subsistencia diaria.


No desesperes, tampoco olvides que las cosas pueden solucionarse, incluso la ayuda terapéutica de un profesional puede mejorar mucho las cosas.

Zaii Elizabeth.

domingo, 23 de octubre de 2011

Hecha un vistazo...

El término "tercera edad" es una expresión social adoptada para referirse a las personas que tienen 60 años o más. Un adjetivo que con el tiempo, al menos en latinoamerica,  ha sido sustituido por la expresión "adulto mayor".

Es un sector  vulnerable de la población que en los últimos años a sufrido de un incremento en el abuso, la discriminación, el maltrato físico y psicológico. En contrapunto a esta situación, la sociedad en general se a abierto a la mentalidad de ver a éstas personas como "Funcionales", se han creado espacios de convivencia, de cuidado; de estudio y preparación así como de trabajo y sustento en casi todos los países en desarrollo del mundo.

¿Qué piensas tú de las personas que han llegado a ésta edad? ¿Qué actitud deberían tomar ante el ciclo de la vida?  ¿Qué harías tú?
Zaii Elizabeth.

Los años viejos...

Todo en la vida tiene un ciclo. Lo que comienza un día, termina y da inicio a algo más. Es verdad, si lo miras bien, las arrugas de su piel parecen contar algo más que los años. 

De los 22.3 millones de hogares en el país, 4.2 millones (18.7%) están encabezados por una persona de 60 años o más. Pero, ¿Y qué hay de los otros? ¡Qué es lo que hacen ahora que sus pies ya no suelen ser tan rápidos como antes. Ahora que sus dientes son sustituidos por una placa de porcelana. Y que su voz parece ser escuchada sólo por la soledad que llevan a todas partes consigo?

Éste Blogg está dedicado especialmente a debatir el tema del mundo que experimentan las personas de la tercera edad, principalmente en nuestro país. Queremos resaltar la importancia que tiene el respeto y cuidado a quienes cursan ya, la ultima etapa de su vida.


 Zaii Elizabeth.